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sábado, 14 de abril de 2012

Postres: Pastelitos de lima-limón

 

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Ingredientes:
Para la base
1 plancha de bizcocho genovés comprado
200 ml de agua
50 gramos de azúcar
Para la crema
1 lima y 1 limón
2 claras de huevo
200 ml de nata para montar
60 gramos de azúcar
4 hojas de gelatina
Para la cobertura.
El zumo de un limón
3 cucharadas de azúcar
2 hojas de gelatina
Preparación:
Recortamos el bizcocho en cuatro círculos individuales, de unos 10 centímetros de diámetro, con la ayuda de un aro de emplatar o de un cortapastas. Colocamos el aro sobre el plato y ponemos el bizcocho en el fondo para que haga de base. Los vamos a humedecer con un almíbar ligero que haremos cociendo el agua y el azúcar hasta que espese un poco.
Para la crema, lavamos concienzudamente la lima y el limón y los secamos. Rallamos la piel de cada uno y después los exprimimos. Remojamos la gelatina en agua fría. Ponemos a hervir 50 ml de agua con dos cucharadas de zumo de limón, removemos para diluirlo todo y dejamos que enfríe para agregar el resto de los zumos y las ralladuras. Montamos la nata y la incorporamos mediante movimientos envolventes a la gelatina fría. Montamos las claras de huevo junto al azúcar y también las agregamos a la mezcla. Repartimos bien esta crema sobre los bizcochos y refrigeramos hasta que coja cuerpo.
Es el momento de hacer la cobertura. Calentamos el azúcar con 10 cucharadas de agua. Remojamos en un vaso aparte la gelatina. Retiramos del fuego este pequeño almíbar e incorporamos la gelatina y el zumo de limón. Dejamos que se enfríe. Napamos la crema de limón con esta cobertura y refrigeramos de nuevo hasta que se cuaje todo.
A la hora de servir, retiramos con cuidado el aro y lo adornamos con un poco de ralladura de limón y de lima, unas fresas o unas virutas de chocolate.

Postres: Alfajores de chocolate con relleno de malvaviscos

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Ingredientes:
3/4 taza de polvo de cacao sin azúcar
3/4 taza de azúcar granulada
3/4 taza de aceite vegetal
2 cucharaditas de polvo de café
2 cucharaditas de extracto de vainilla
1/2 taza de café caliente
1/2 taza de mantequilla
1/2 taza de agua
3 1/2 taza de harina para todo uso
1 taza de azúcar morena
1 huevo grande
1 cucharadita de polvo para hornear
1 cucharadita de bicarbonato de sodio
1 cucharadita de polvo para hornear
1/2 cucharadita de sal
Relleno:
2 tazas de crema de malvaviscos
1 taza de manteca vegetal
1 taza de azúcar en polvo
1 cucharada de extracto de vainilla
Preparación:
En un bowl grande, mezcla el polvo de cacao, el polvo de café, el café caliente y la taza de agua hasta que se genere una mezcla suave. Continúa agregando el aceite vegetal, el azúcar granulada y también el azúcar morena.
Lentamente, comienza a agregar la harina, la sal, el polvo para hornear y el bicarbonato de sodio para asegurarte que los sabores verdaderamente se acentúen. Y no olvides, por supuesto, la vainilla y también la porción indicada de mantequilla.
Revuelve. Procura que todos los ingredientes queden completamente uniformes.
Prepara una bandeja enmantecada y enharinada. Luego, utilizando una cuchara sopera, comienza a tomar pequeñas porciones de la preparación para colocarlas, dejando una distancia bastante considerable.
Intenta redondear la masa con la cuchara para que los alfajores queden realmente fantásticos.
Hornea por unos 10 o 15 minutos hasta que los bordes comiencen a agrietarse. Igualmente, para asegurarte, no olvides pincharlos con un palillo o tenedor hasta ver que salga limpio.
Después de que se encuentren prontos, retíralos del horno y colócalos a temperatura ambiente para que se enfríen.
¡Y ahora ya podemos pasar al relleno! Para ello, en un tazón mediano, comienza a mezclar la salsa de malvaviscos, la manteca, el azúcar y la cucharada de vainilla.
Revuelve por al rededor de unos 3 o 5 minutos y ¡listo!
Coloca la preparación en una manga pastelera y empieza a rellenar las delicias de chocolate que habías realizado anteriormente. Añade una buena cantidad de relleno de malvaviscos para que los alfajores queden tentadores.
¿No son una delicia? Inténtalos. Verás que serán el toque dulce que todas las tardes necesitan junto a un rico café.

Recetas de Postres: Bocaditos de pan de queso

1

Ingredientes:
1/2 taza de leche entera
1/2 taza de agua
1/2 taza de mantequilla sin sal
1/2 cucharadita de sal
1 taza de harina para todo uso
5 huevos grandes
1 1/2 tazas de queso rallado
Preparación:
Para comenzar la receta, consigue la medida exacta de queso rallado con un rallador.
En una olla de tamaño mediano, agrega la leche, el agua, la mantequilla y la sal. Añade lentamente la harina y revuelve constantemente hasta lograr una consistencia uniforme y sólida.
Continúa revolviendo con un cucharón hasta que se genere una masa pesada. En caso de que los ingredientes queden demasiado coagulados, puedes agregar un poco más de leche o agua para alivianar.
Coloca la preparación en una batidora. Incorpora los huevos, uno a la vez. Después, tampoco olvides incorporar el queso rallado, que será el encargado de otorgar el sabor principal a la receta.
El resultado final será una mezcla grumosa con una aroma realmente estupendo.
En una bandeja enmantecada, coloca pequeñas porciones de masa. Puedes realizar pequeñas bolitas con una cuchara o simplemente con la mano. ¡Como prefieras!
Lleva la bandeja al horno y luego de unos 12 o 15 minutos aproximadamente ya puedes disfrutar de estos deliciosos bocaditos de pan de queso.

Postres: Chips de donas glaseadas con azúcar y canela

3

Ingredientes:
25 donas glaseadas
1/4 taza de canela y azúcar
Preparación:
Corta las donas. Para ello, puedes utilizar un cuchillo y cortar pequeños círculos o aros para saltear con más facilidad.
Luego de que ya tengas todas las chips cortadas, espolvoréalas de forma abundante con canela y azúcar. Recuerda que para esta receta nunca llegarás al exceso... ¡Cuanto más dulce, mejor!
Engrasa levemente una sartén, y ya puedes comenzar el glaseado.
Una vez que el sartén se encuentre en el fuego coloca unas pocas chips previamente espolvoreadas. La preparación durará tan solo unos pocos minutos, y solo tendrás que esperar unos 5 minutos para que comience el delicioso glaseado y caramelizado.
El resultado final será unas chips de donas glaseadas con azúcar y canela verdaderamente estupendas. Y como recomendación personal, no dejes de degustar esta receta con una buena porción de helado de vainilla. ¡La combinación de sabores será realmente excepcional! Ya lo verás.

Postres: Torta de banana baja en calorías

2

Ingredientes:
2 ¼ taza de harina
2 ½ cucharaditas de polvo de hornear
½ cucharadita de bicarbonato
½ cucharadita de sal
1 ¼ tazas de azúcar
½ taza de puré de manzana sin azúcar
3 cucharadas de aceite de coco
2 plátanos medianos machacados
1 cucharadita de vainilla
2 cucharadas de harina de lino mezcladas con 6 cucharadas de agua (sustituto del huevo)
½ taza de suero de leche
2 tazas de queso crema bajo en grasa
1 ¼ tazas de azúcar glasé
1 cucharadita de vainilla
Leche descremada (para diluir)
1 plátano en rodajas
Preparación:
Precalienta el horno a 180ºC. Engrasa dos moldes de 20 cm y separa.
En un tazón grande combina la harina, el polvo de hornear, el bicarbonato, la sal y el azúcar. Agrega el puré de manzana, el aceite de coco, el plátano y la vainilla. Con una batidora eléctrica bate durante 2 minutos a velocidad media hasta que se mezclen bien. Añade la harina de lino y el suero de leche, y bate 2 minutos más.
Vierte la mezcla en los moldes preparados y hornea por 30-35 minutos hasta que la masa retroceda si se le presiona suavemente con los dedos. Deja que los moldes se refresquen durante 10 minutos. Desmolda y pon a enfriar del todo sobre una parilla.
Para preparar el glaseado, combina en un tazón el queso crema y la vainilla hasta que esté cremoso. Poco a poco añade el azúcar glasé y deja que alcance la consistencia deseada. Utiliza la leche descremada si necesitas diluir un poco la crema.
Coloca una de las dos tortas en un plato y cúbrela con la mitad del glaseado. Por encima coloca las rodajas de banana. Ahora pon la otra torta arriba y cúbrela con la crema restante.
Sirve a la hora del desayuno. Esta sabrosa torta de banana baja en calorías sabe como a pan de banana, pero cubierta de crema de queso. Es húmeda y deliciosa. Y lo mejor de todo, disfrutarás de un buen trozo de torta sin sentirte culpable.

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