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miércoles, 14 de mayo de 2014

Recetas:Bizcocho 'fondant' de chocolate



Ingredientes:

200 g de chocolate de cobertura
15 g de harina
150 g de mantequilla
3 huevos
100 g de azúcar
6 c.s. de nata

Preparación:

Trocear el chocolate y fundirlo con la mantequilla al baño María.
Precalentar el horno a 180º.
Batir los huevos con el azúcar.
Incorporar la harina y la nata y mezclar.
Añadir la mezcla de chocolate y mantequilla, mezclar y verter en un molde de silicona de 20 cm de diámetro.
Hornear 25 min a 180º.
Dejar enfriar antes de desmoldar.
Repartir en los platos y servir.



Bizcocho de té verde, en diez pasos



INGREDIENTES:

Cuatro huevos, 220 g de harina, 220 g de mantequilla, 100 g de azúcar glas, una cucharada sopera de té verde en polvo, un sobre de levadura en polvo, sal.

ELABORACIÓN:

-Separar las yemas (que reservaremos) de las claras.

-Montar las claras a punto de nieve con 50 gramos de azúcar.

-Precalentar el horno a 180ºC.

-Mezclar la mantequilla en pomada con el resto del azúcar (los otros 50 gramos)

-Añadir las yemas que habíamos reservado a la mezcla de mantequilla y azúcar, y batir.

-Agregar la harina, la levadura, el té y una pizca de sal, y mezclar todo.

-Incorporar delicadamente las claras montadas.

-Verter toda la mezcla obtenida en un molde de bizcocho.

-Hornear durante 30 min a 180ºC.

-Desmoldar, dejar enfriar y servir.




Bizcocho de zanahoria, en diez pasos



Ingredientes necesarios:

250 g de zanahoria rallada, 50 g de pasas, 160 g de harina, 160 g de azúcar, 20 g de mantequilla en pomada, 100 ml de aceite de girasol, 1 huevo, 5 g de levadura en polvo, 1 c.c. de canela molida, 1 pizca de sal, mermeladas de naranja y limón.

ELABORACIÓN:

1. Precalentar el horno a 160º.

2. Tamizar la harina, la levadura, la canela y la sal sobre un bol grande.

3. Mezclar en una ensaladera el huevo, el aceite y el azúcar.

4. Añadir al bol de la harina y continuar mezclando hasta lograr un compuesto homogéneo, sin grumos.

5. Incorporar la zanahoria y las pasas y mezclar de nuevo.

6. Engrasar con la mantequilla un molde de ‘cake’ y verter la mezcla en el interior.

7. Meter una hora al horno a 160º.

8. Retirar del horno y dejar templar.

9. Desmoldar y colocar en una fuente alargada.

10. Cortar en rebanadas gruesas y acompañar con las dos mermeladas



Trucos de cocina: un bizcocho… ¡irresistible!



¿Cómo saber si está hecho?, ¿qué moldes son los más adecuados?, ¿cuál es la temperatura óptima de cocción?...

No se trata de una receta especialmente complicada. Sin embargo, a la hora de preparar un bizcocho es necesario tener en cuenta una serie de recomendaciones (además, claro, de un buen horno). Estos son algunos consejos para lograr un bizcocho... ¡irresistible!:

Si compruebas que con tu horno la parte superior de los bizcochos o pasteles se queman puedes cubrirlos hacia el final de la cocción con una hoja de aluminio.
No olvides hacer caso a las indicaciones de temperatura que figuran en las recetas (no hay una temperatura estándar). Si es demasiado fuerte es probable que se forme una especie de costra en la superficie antes de que el bizcocho o pastel haya subido mientras que, si es baja, la masa permanecerá húmeda.
Es importante no abrir la puerta del horno hasta que hayan pasado las tres cuartas partes de tiempo de la cocción del pastel ya que, si no, puede bajar. Cuando lo hagas, no lo saques demasiado de la rejilla, ya que el contraste calor-frío podría provocar que el bizcocho bajase.
Recuerda que los hornos eléctricos deben precalentarse durante al menos 15 minutos. En los de gas bastará con cinco minutos.
Para saber que un bizcocho está listo, un buen truco consiste es pincharlo con una aguja larga. Si está hecho, la aguja saldrá seca y caliente.
Las pastas y pasteles de tamaño pequeño estarán hechos cuando se despeguen con facilidad de la plancha. Retíralos entonces enseguida de la misma, ya que el calor que queda puede endurecerlos.
Si usas un molde nuevo es conveniente meterlo vacío durante unos 15 minutos en el horno muy caliente antes de emplearlo por primera vez.
Los moldes antiadherentes resultan muy cómodos porque facilitan la tarea de desmoldado y, además, son fáciles de lavar. Aún así, también se pueden untar previamente con algo de mantequilla o aceite.


Fuente hola.com/cocina

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